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Artículo de revista

En este texto de la escritora Eli Bartra, se abordan dos tipos de expresiones artísticas típicas de Japón: las lacas shunkei y las hagoitas. Primero la autora comienza mencionando que actualmente la migración y la interculturalidad son fenómenos comunes en distintas partes del mundo, Japón no es la excepción. El teórico japonés Yanagi, impulsor del arte popular, cuyo parámetro de artesanía es que el producto no contenga la firma del artista creador, y asegura que en su país no hay una diferencia entre las artesanías y las bellas artes; Bartra a pesar de diferir con este punto se da cuenta que efectivamente dicha distinción es meramente arbitraria. Primero habla de las lacas shunkei, obras de arte popular japonés alabadas y casi veneradas como la cerámica, que aunque son originarias de China fue en Japón donde consiguieron el perfeccionamiento técnico por lo que son el orgullo de la nación. Por otro lado están las hagoitias, las cuales a diferencia de las lacas sólo han sido reconocidas localmente, e inclusive son más multicolores y hechas en las urbes, tampoco encontramos a muchas mujeres en su producción salvo la maestra artesana Akiko Goto, que como todos los maestros ha requerido más de diez años de preparación, y trabaja 360 días mientras su esposo no no la ayuda con el trabajo doméstico. La invisibilidad de las mujeres y su trabajo así como su poca participación en la producción de artesanías no impide que la hagoitia vuelva la antigua cultura japonesa parte de la cultura visual actual.